El hummus de calabacín es un acompañante ideal para tomar especialmente en los meses de calor. Es un plato que no se cocina ya que los calabacines se usan crudos. Es sencillo de preparar y una forma diferente y sabrosa de consumir verdura.

Además, queda delicioso sobre pan de masa madre casero y recién tostado o con unos palitos frescos de zanahoria, apio o arbolitos de brócoli.

Ingredientes:

• 1 calabacín pequeño lavado, sin pelar y cortado en dados.
• ½ diente de ajo.
• 3 cucharadas de crema de sésamo (tahin).
• 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
• Sal marina sin refinar al gusto.
• Zumo de ½ limón (opcional).
• Pimentón dulce o picante para decorar (según gustos).

Elaboración:

1. Lavamos el calabacín, le quitamos el tronco de la parte superior y lo cortamos en pequeños trozos.
2. Ponemos en el vaso de la batidora todos los ingredientes excepto el pimentón y lo trituramos hasta obtener una crema suave y densa parecida al hummus.
3. Rectificamos de sal y de aceite y lo colocamos en el recipiente elegido, espolvoreamos por encima el pimentón en polvo con la ayuda de un colador pequeño.

Nota: A mí me gusta preparar el hummus con tiempo y mantenerlo en la nevera fresquito hasta su consumo, de esta manera, permitimos que los diferentes sabores se asienten y tenga un sabor más intenso.

Como lees es súper fácil de hacer. ¿Te vas a quedar sin probarlo?